El estudio aborda la necesidad de desarrollar un índice para evaluar las capacidades de los organismos electorales (OE) en América Latina. En un contexto de desafíos crecientes a la democracia en la región, el índice propuesto pretende clasificar a los OE basándose en su nivel de independencia del poder ejecutivo, la concentración de sus funciones y su capacidad para resistir presiones políticas. Utilizando una metodología comparativa, este trabajo investiga los distintos diseños institucionales de los OE y sus implicaciones en la confianza ciudadana y la integridad electoral. A través de un enfoque multidimensional, el índice aspira a ser una herramienta fundamental para analizar y fortalecer la resiliencia de las instituciones electorales frente a los avances autoritarios.