La estomatología no sólo pretende mantener la salud bucal mediante los tratamientos de reemplazo o sostén, sino que la meta es la promoción de salud y prevención de enfermedades relacionadas con el complejo estomatognático por medio del cuidado y limpieza de toda la cavidad bucal y la eliminación de hábitos nocivos. Se pretende ayudar al médico a atender y comprender la importancia que tiene el conocimiento de estos aspectos, porque la boca puede ser el reflejo de la educación sanitaria, de padecimientos sistémicos o el medio de identificar reacciones adversas de múltiples farmacoterapias1. Una distribución anormal de la mucosa bucal queratinizada y no queratinizada requiere una atención muy especial. Si el paciente utiliza una prótesis completa o parcial, se la debe quitar para poder examinar los tejidos blandos subyacentes. El tejido queratinizado que se desarrolla en una zona normalmente no queratinizada presenta un aspecto blanquecino. Esta anomalía denominada leucoplasia bucal obliga a practicar una biopsia, ya que puede tratarse de una lesión precancerosa2.